Ayahuasca

28 de noviembre de 2014

Lo importante es soltar - Adyashanti

Demasiada gente abdica de ser responsable de sí misma. En la espiritualidad, demasiada gente quiere que alguien le diga qué hacer. Quieren que el maestro les diga: “Haz esto o no hagas eso. Medita tanto tiempo o tanto otro”. Si nos vemos atrapados en este hábito, podemos quedarnos en una especie de infancia espiritual. En un momento dado necesitamos crecer; necesitamos mirar dentro de nosotros y encontrar nuestro guía interior. Hay cosas que la mayoría de los seres humanos saben, aunque no quieran saberlas. Saben profundamente que ciertos aspectos de sus vidas funcionan o no, que ciertas partes de su existencia son funcionales y otras no lo son. Sin embargo, a veces, como seres humanos, no queremos saber lo que no nos conviene. Entonces fingimos que no sabemos.

Lo más importante es salir del fingimiento. Hay un momento y un lugar para cada cosa. Hay un tiempo para hacer esfuerzos y ser disciplinado, para soltar y darte cuenta de que no puedes hacerlo solo, de que depende de la gracia, de que el esfuerzo y la lucha no forman parte del proceso.


Pero entiende una cosa: la trayectoria de nuestra vida espiritual y de todo despertar espiritual -cualquiera que sea nuestra vía, tanto si es progresiva o directa como si es devociones o de otro tipo- nos lleva hacia la rendición. En definitiva, ése es el objetivo del camino espiritual. Todo lo que hacemos nos lleva a un estado espontáneo de rendición, de dejar ir. Ahí es donde todo nos conduce, cualquiera que sea el camino, cualquiera que sea la práctica. Cuando sabes esto, te das cuenta de que cada paso del camino es la siguiente oportunidad de rendirte. Es posible que requiera mucho esfuerzo llegar allí, que requiera mucho esfuerzo llevarte al punto en el que estés dispuesto a rendirte a la gracia, pero, al final, toda la espiritualidad se resume en soltar la ilusión del yo separado, soltar lo que pensamos que es el mundo y cómo creemos que debería ser. Tenemos que estar dispuestos a perder nuestro mundo. Ese estar dispuestos es la rendición; ese estar dispuestos es soltar. Y cada uno de nosotros tiene que ver lo que ese soltar significa para nosotros, qué tenemos que soltar. Que esto nos resulte fácil o difícil no importa lo más mínimo. En definitiva, lo importante es soltar.

El Final de tu Mundo, Adyashanti.